Por: Cindy Regidor

Entre enero y junio de 2022, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) registró 84 055 detenciones de migrantes de nacionalidad nicaragüense en sus fronteras. Se trata de una cifra récord que implica un aumento de 358% en comparación con el mismo semestre de 2021, cuando fueron 18 356 las detenciones de migrantes nicaragüenses.

En mayo las autoridades informaron de 19 080 detenciones, una cantidad sin precedentes de migrantes de Nicaragua, en junio reportaron 11 258. A pesar de ello, la cifra sigue siendo considerable, pues implica que, en promedio, se dan unas 375 aprehensiones diariamente.Ese descenso puede deberse a la temporada climática del año, que es la más caliente en Estados Unidos, lo que hace que el viaje sea más difícil para quienes que cruzan por zonas desérticas, consideró Astrid Montealegre, abogada de inmigración y supervisora legal de la Alianza Nicaragüense Americana de Derechos Humanos (NAHRA, por sus siglas en inglés).

Consideró que los nicaragüenses han sido disuadidos también por los reportes de más muertes de migrantes nicas, a causa de viajes sumamente riesgosos y ahogamientos al intentan cruzar por el Río Bravo, que sirve de frontera natural entre México y Estados Unidos.Montealegre dijo que, a partir del trabajo de NAHRA con población migrante nicaragüense, se puede determinar que los migrantes nicaragüenses hacia Estados Unidos, son varones de entre 13 y 40 años. Además, hay un aumento de mujeres y niños viajando, así como de familias completas.

En cuanto a las zonas de origen, la especialista en temas migratorios destacó que muchos de los viajeros salen del norte del país y de las zonas rurales, particularmente existe un flujo procedente de municipios como Jinotega y Muy Muy.

Aumento desde 2018

Nicaragua ha sido históricamente un país emisor de migrantes; sin embargo, a partir de 2018 con el estallido de la crisis sociopolítica y económica, se ha registrado flujos nunca antes vistos, ni siquiera durante la década de 1980 durante la guerra civil. En 2021, las autoridades en Estados Unidos documentaron 87 575 detenciones de nicaragüenses.

A partir de junio y julio de ese año se observa un pico significativo en la migración nicaragüense, que coincidió con el agravamiento de la situación política del país, cuando el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo encarceló a los principales aspirantes presidenciales de la oposición, periodistas, empresarios, defensores de derechos humanos, analistas, exdiplomáticos y líderes cívicos. Los arrestos ocurrieron previo a la votación de noviembre, en las que el binomio presidencial se autoproclamó ganador sin competencia, con una masiva abstención ciudadana y sin el reconocimiento de la mayoría de países de América y Europa.En comparación con otros países de Centroamérica emisores de migrantes hacia Estados Unidos, Nicaragua ya supera a El Salvador, que junto con Guatemala y Honduras —conocidos como Triángulo Norte—, han sido los tres países de donde se origina principalmente la migración en el istmo.

Al ver las estadísticas de la CBP del primer semestre de 2022, en primer lugar se ubica Guatemala con 120 140 detenciones; en segundo lugar Honduras, con 102 755; en tercero Nicaragua con 84 055; y en cuarto El Salvador, con 48 198.

Los nicaragüenses también han emigrado a lo largo de las décadas hacia Costa Rica, que registra, entre 2018 y lo que va de 2022, más de 200 000 solicitudes de refugio, de las cuales el 90% corresponden a nicaragüenses.