Como comandante general del Ejército, Morales Bermúdez encabezó en agosto de 1975 el denominado "Tacnazo", un contragolpe de Estado contra el presidente militar del país, Juan Velasco Alvarado, quien siete años antes había derrocado en otra asonada al mandatario Fernando Belaúnde.

Durante su mandato (1975-1980), en lo que se conoce como la segunda fase del Gobierno Revolucionario Militar de Perú, Morales Bermúdez autorizó el retorno de los exiliados e indultó a líderes del partido Acción Popular, hasta entonces perseguidos.

En febrero, un tribunal italiano confirmó la cadena perpetua del dictador por su papel en las desapariciones que se produjeron en el país andino entre 1970 y 1980, como parte del llamado Plan Cóndor de coordinación represiva de las dictaduras latinoamericanas.

El Tribunal de Casación de Roma dejó firme la condena a perpetua que el exmandatario peruano había recibido en 2017 y luego había sido ratificada en 2019 por su participación en la coordinación para secuestrar y asesinar a ciudadanos impulsada por las dictaduras de la Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Perú, Paraguay y Uruguay.

Morales Bermúdez fue juzgado en Italia porque entre algunos de esos centenares de desaparecidos y torturados había ciudadanos ítalo-peruanos.

Según asociaciones de derechos humanos, el expresidente peruano permitió con su accionar el secuestro de Noemí Gianotti Molfino por militares del Batallón 601 del Ejército Argentino en la ciudad de Lima.

Antes, la justicia italiana lo había condenado por el asesinato de otros dos argentinos, también a manos del Batallón 601 del Ejército argentino: Lorenzo Viñas Gigli y Horacio Domingo Campiglia, secuestrados en Brasil en 1980 y luego desaparecidos.

El fallecimiento del mandatario fue confirmado por su hijo, Remigio Morales Bermúdez, quien precisó que su muerte se produjo a las 23.20 horas de ayer por algo "relacionado con su edad".

"(Fue) por un tema más relacionado por su edad. Había cumplido 100 años, estaba un poco delicado. Se le presentó un desbalance general del cual al final no se pudo restablecer, no pudo salir", indicó el hijo a RPP Noticias.

Tal como solicitó por escrito, el exdictador será velado en la iglesia San Felipe Apóstol, en San Isidro, a la que acudió a lo largo de su vida.