El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, renovó las cúpulas policial y militar mediante sendos decretos ejecutivos en medio del estado de excepción decretado hace una semana en tres provincias para combatir al crimen organizado.

Así, el hasta ahora comandante general de la Policía de Ecuador, Carlos Cabrera, fue reemplazado por el general Fausto Salinas, quien hasta ahora se desempeñaba como director general de Seguridad Ciudadana y Orden Público, según el texto de la medida, difundida en Twitter por el ministro del Interior, Patricio Carrillo.

El otro decreto, enfocado en el alto mando militar, estipula el cese de las funciones para el jefe del Comando Conjunto, Fabián Fuel; el comandante general de la Fuerza Terrestre, Luis Enrique Burbano; y el comandante general de la Fuerza Aérea, Dionicio Espinel Puga.

Los cargos serán ocupados por los generales Nelson Bolívar Proaño, Franklin Gustavo Acosta y Gabriel Marcelo García, respectivamente, informó la agencia de noticias DPA.

Por su parte, el contraalmirante Luis Brumel fue ratificado en la Comandancia General de la Fuerza Naval, informó el diario ecuatoriano El Telégrafo.

La Policía y las Fuerzas Armadas, que están a cargo de la seguridad en Ecuador, han centrado sus acciones principalmente en las provincias de Esmeraldas, Manabí y Guayas, donde desde hace una semana rige un estado de excepción de 60 días decretado para combatir al crimen organizado y reducir los hechos violentos.

Unos 9.000 militares y policías tomaron por 60 días el control de esas tres provincias, donde el narcotráfico y la criminalidad causaron más de 1.200 muertes en lo que va del año.

De la mano del narcotráfico creció la violencia en Ecuador, con 1.255 muertos -entre ellos decapitados y mutilados- en el primer cuatrimestre de este año frente a los 2.500 de todo 2021 y 1.400 de 2020.