"El principal llamado es que se ponga fin al uso letal de la fuerza", instó Erika Guevara, representante de AI para las Américas, en conferencia de prensa desde Lima.

Guevara y otros miembros de AI fueron recibidos por la mandataria peruana en el Palacio de Gobierno de Lima, sede del Ejecutivo, en una reunión que duró dos horas.

"La presidenta Boluarte nos informó que nunca ha habido una orden de uso de armas letales (de parte de las fuerzas de seguridad), pero las pruebas que presentamos es que sí existe el caso", agregó, y destacó la verificación del "uso indiscriminado de armas letales".

"Hemos conocido y documentado 46 casos de diversas violaciones a derechos humanos, que van desde el uso excesivo y desproporcionado de la fuerza, detenciones arbitrarias, criminalización y casos de personas que han perdido la vida en manifestaciones", precisó, informó la agencia de noticias Sputnik.

"Hemos informado (a Boluarte) que los casos que hemos documentado no se trata de personas que ejercían violencia, sino de personas que protestaban pacíficamente y fueron víctimas de represión violenta", agregó.

Guevara agregó que, por su parte, la mandataria peruana le expresó el compromiso de su Gobierno de "avanzar con la atención de las víctimas de violaciones de derechos humanos", lo que consideró un "paso importante porque reconoce que hubo violaciones a derechos humanos".

Desde diciembre, diversas protestas sociales vienen ocurriendo en Perú de parte de grupos y organizaciones de ciudadanos.

Los manifestantes exigen la salida de Boluarte y de los miembros del Congreso a través del adelanto de elecciones generales, y una reforma constitucional.

Según datos publicados ayer por la Defensoría peruana, murieron 49 personas (48 civiles y un policía) en enfrentamientos y otras 11 como consecuencia de los cortes de rutas, y al menos 1.299 personas (entre ellas, 333 policías y seis militares) resultaron heridas.